Finalmente, tras una gestión que comenzó a mediados de 2015, el Ministerio de Salud de la Nación adquirió a través de una compra directa la primera partida de sofosbuvir, medicamento que representa la cura para la Hepatitis C. Este primer lote está destinado al tratamiento para las casi 1.200 personas que tienen Hepatitis C en estado avanzado y que por su situación crítica necesitan el medicamento en forma urgente, si bien con la cantidad de unidades adquirida podrían tratarse más de 1.500.

La versión adquirida de sofosbuvir, de 400 miligramos, fue comprada en forma directa a Gador S.A., representante en Argentina de la empresa multinacional Gilead, y a Laboratorios Richmond S.A.C.I.F., productor nacional del genérico. Gilead es precisamente la compañía que busca el monopolio a través de la petición de patente para luego comercializar el producto mediante Gador en forma exclusiva en el mercado argentino. La Fundación Grupo Efecto Positivo (FGEP) presentó en mayo del año pasado una oposición a la solicitud de patente demostrando, a través de estudios, que la patente no debe otorgarse a Gilead ya que su petición no reúne los requisitos de patentabilidad necesarios. Estos estudios demuestran que este monopolio y los altos precios que conlleva podrían costarle al Programa Público de Provisión de Medicamentos un 115.000% más de su presupuesto actual.

Desde FGEP celebramos que se haya concluido la compra porque significa salvar la vida de muchas personas que dependían de poder acceder al sofosbuvir. Pero además es clave, en palabras de nuestra Directora Ejecutiva, Lorena Di Giano “tener más de un oferente, especialmente si uno de ellos es un productor nacional del genérico. Esto abre la posibilidad de que algún día podamos adquirir el medicamento por licitación y a precios más accesibles”.

Como figura en el Boletín Oficial del día 5 de enero, la compra consistió en la adquisición de 52.416 unidades a $51.105.600 a Gador (precio por unidad: $975) y de 89.600 unidades a $20.966.400 (precio por unidad: $234). Las claras diferencias que evidencian los precios de adquisición a uno y otro oferente demuestran que la producción nacional, la oferta de genéricos y la ausencia de monopolios favorecen la sustentabilidad de los programas públicos y de esta manera el acceso a los medicamentos para las personas que más los necesitan.

Desde FGEP continuaremos trabajando por un acceso sustentable a medicamentos de calidad y asequibles, reafirmando nuestro compromiso con la convicción de que los medicamentos no son mercancías, sino un bien social que garantiza el derecho humano a la salud.